Conferencia
Episcopal de Chile
Comisión Nacional de
Bioética
La píldora del día
después, un atentado contra la vida
Algunas consideraciones en tomo a la
"píldora del día después" o "anticoncepción de
emergencia":
1. Es de público conocimiento
que una vez más se está promoviendo la denominada "píldora del día después",
compuesto de Levonorgestrel 0,75 mg. y que en Chile se vende bajo el nombre de
"Postinor 2". Este fármaco disminuye la probabilidad de embarazo, respecto de lo
que normalmente ocurriría en una relación sexual sin anticonceptivos.
2. El uso de este fármaco merece
varios reparos éticos. El más relevante es su eventual efecto abortivo. Para
evitar ambigüedades del lenguaje, entendemos por aborto "la eliminación
deliberada y directa, como quiera que se realice, de un ser humano en la fase
inicial de la existencia, que va de la concepción al nacimiento" (S.S. Juan
Pablo II, Evangelium Vitae nº 58).
3. La información científica
puesta a nuestra disposición demuestra que el fármaco podría alterar o impedir
la implantación, con lo que se produce la eliminación del embrión, es decir, un
aborto. Así lo reconocen los propios laboratorios que distribuyen el producto,
al advertir en su instructivo que "puede impedir la implantación". Un mal
probable no es un probable mal sino que un mal cierto. Vender y entregar esta
píldora sabiendo que puede impedir la anidación es un atentado en contra de la
vida de las personas.
4. Hoy se pretende distribuir en
forma gratuita este fármaco aduciendo que se quiere limitar sólo al drama de las
mujeres que han sido violadas. Sin embargo, para su entrega no se requiere que
se compruebe médicamente el hecho, ni que se denuncie a la justicia.
5. Esto significa que en la
práctica cualquier mujer podrá disponer de la Píldora del día después diciendo
que fue objeto de una violación. Con esto se evita la discusión -abordada, en
cambio, seriamente en otros países- sobre si el fármaco puede ser comprado con o
sin receta médica en cualquier farmacia. En Chile se distribuirá gratis.
6. Lamentamos que el drama de
las mujeres violadas se preste para hacer una distribución gratis y masiva de un
fármaco que puede atentar contra la vida de un ser humano.
Santiago de Chile, 16 de abril
de 2004
† Andrés Arteaga M., Obispo
auxiliar de Santiago
Pbro. Dr. Fernando Chomali
G.
Dr. Patricio Ventura-Juncá
T.
Carmen Domínguez
H